Esta
historia que os voy a contar está basada en hechos de la imaginación de un pajero.
Sucedido sobre los
años ochenta, donde ocurre en un barrio llamado el Embudo, este barrio era
tranquilo, ya que la mayoría de la gente estaba en el mar pecando, porque era
una factor económico importante, ya que tenían al lado el mar.
En el Embudo
había una familia donde había una madre llamada Carmen, un padre que se llamaba
Richard y dos hijos, el mayor se llamaba Santiago que tenía 16 años y el menor que se llamaba Marcos que tenía 12
años, esta familia era pobre ya que solo trabajaba el padre de pescador, Carmen
era la ama de casa que se encargaba de cocinar y cuidar de Santiago y Marcos.
Un día
soleado vino un circo al barrio para quedarse dos semanas, este circo se llamaba
“Las Américas” y era un circo muy famoso en todo el país ya que sus precios
eran muy baratos y hacían actuaciones casi imposible de realizar, desde andar
con una bici de una sola rueda por una fina cuerda, hasta conseguir que los
tigres formaran una pirámide entre ellos, los espectadores se asuntan mucho
porque podía ocurrir cualquier cosa, pero estos eran profesionales. Un grupo de
chavales que eran amigos de Marcos, cogían los carteles que colgaban, se
colaban en la actuaciones, tiraban piedras a los animales incluso dejaron
escapar los avestruces que tenía el circo, uno de los encargados del circo
vieron a estos chavales y cogió a cuatros perros de raza rottweiler y estos
perros siguieron estos chavales hasta calle bajo hasta cazar a uno de ellos,
que por desgracia era Marcos, lo cogieron desde el cuello, apareció el del
circo lo cogió de brazos y lo llevo al médico del circo, aunque sabía que el
niño estaba muerto, se había ahogado con su propia sangre.
Pasaron
cuatro días, Santiago no estaba, estaba de excursión de fin de curso durante
una semana, Carmen y Richard estaban preocupados porque su hijo no aparecía,
llamaron a la policía y se abrió una investigación, y tras a ver investigado
muchos interrogando a sus amigos y a los vecinos que le vieron acabaron hasta
el circo, allí se descubrió huesos de humano en la jaula de los tigres,
investigaron los restos y descubrieron que esos huesos pertenecían a Marcos,
todos los vecinos fueron a protestar sobre lo ocurrido y tomaron la justicia
por sus manos, quemaron todas las caravanas, casi matan a unos encargados del
circo, estos hicieron la maletas cuanto pudieron y si fueron de ahí corriendo. Desde aquel
día el Embudo se convirtió en una barrio intranquilo la gente no vivía segura,
ya que tenían aún el miedo en el cuerpo por lo sucedido, la familia de Marcos
desde entonces odian a los payasos y a todo lo que relacione al circo.
Se dice que
esos huesos fueron enterrados en una colina que había cerca del barrio y que
cada vez que viene un circo el espíritu de Marcos aparece lanzando piedras y
los carteles misteriosamente desaparecen junto a los animales